Anacardium Orientalis: Ángel y demonio……..

Editorial de Renzo Galassi Presidente de la LMHI

Al leer nuestra Materia Medica, podemos ver los síntomas de los voluntarios y, cuando la Materia Médica es fiable, también tenemos el placer de encontrar la verificación de algunos síntomas en las experiencias clínicas de los autores buenos. Cada vez estoy más convencido de que la mejor literatura homeopática se encuentra en los antiguos maestros de la primera parte de nuestra historia.

En ocasiones, cuando leo mis Materias Médicas favoritas, dejo la lectura por un momento y me pongo a pensar en la posible relación entre las imágenes presentadas por los síntomas y mi vida cotidiana. Así, hace unos días, estaba repasando los síntomas de la patogenesia de Anacardium orientalis de Hahnemann y sus primeros estudiantes, publicada en el segundo volumen del Archivo de E. Stapf (1788-1860) en 1823 y ampliada en la segunda edición de las Enfermedades Crónicas de Hahnemann (1755-1843) en 1835. En la patogenesia, podemos ver claramente el aspecto de las “dos voluntades” que el voluntario percibió. Repasando los Guiding Symptoms de Constantine Hering (1800-1880), encontramos más síntomas relacionados con esta sensación, que también queda reflejada en el libro de texto de Materia Medica de Adolph Von Lippe (1812-1888). Sin embargo, en Hering, se ve un síntoma en grado 3 que procede de una verificación clínica y que se expresa como: ”En un oído, un demonio, en el otro un ángel; uno le induce a matar, mientras que el otro a actuar con benevolencia”. Este síntoma pasó al repertorio de la mano de Calvin B. Knerr (1847-1940), yerno de Hering, y fue añadido posteriormente al repertorio de James Tyler Kent (1849-1916).

Este síntoma que recuerdan todos los estudiantes, me vino a la mente unos días atrás, cuando estaba de viaje por la India, visitando algunas comunidades homeopáticas en diferentes ciudades, dando conferencias y visitando centros de enseñanza y hospitales … ¡hospitales homeopáticos!

Saliendo de Italia, tuve tiempo de leer en los periódicos docenas de artículos contra nuestra medicina que siempre repiten las mismas cosas descabelladas … que nuestros pacientes son un grupo de personas estúpidas que creen que se curarán con homeopatía y que viven en una especie de “delusion”, porque es imposible curarse con homeopatía, dado que unos cuantos científicos han determinado que nuestros remedios están hechos de NADA. Así, nuestra medicina solo es placebo y si eliminan enfermedades o sufrimientos importantes, eso solo es otra “delusion” … ¡no es verdad, no es posible!

Mientras que el avión estaba despegando, empecé a escuchar en mi oído izquierdo la voz de un demonio que iba repitiendo estas frases y me fue atormentando durante horas … Afortunadamente, pude dormir un poco durante la última parte del vuelo. Tras llegar a Delhi a las 5 ½ de la mañana, empecé mi viaje por la India, visitando el primer día dos hospitales homeopáticos, en dónde había pacientes con enfermedades graves, tratados exclusivamente con homeopatía. ¡Estos hospitales están subvencionados íntegramente por el Gobierno de la India!

Imagen1De pronto, me di cuenta de que ahora era mi oído derecho que oía una nueva voz, esta vez la de un ángel, susurrándome cosas maravillosas sobre la homeopatía: “aquí, la homeopatía funciona, al igual que en tu clínica. Aquí hay facultades y universidades de homeopatía. Aquí el gobierno está subvencionando tu medicina, apoyando la investigación y los diferentes hospitales homeopáticos, en donde los tratamientos de los pacientes son pagados por el Ministerio …”.

En la Universidad Homeopática de Jaipur, pude dar una conferencia a alrededor de 500 estudiantes de entre 18 y 22 años de edad. …

la voz del ángel en el oído derecho me seguía hablando…

En Nagpur, durante el Congreso Nacional del IIHP, la Asociación Homeopática más grande de la India, estaba en el podio al lado del Ministro de Salud AYUSH de la India. Me resultó difícil oír lo que estaba diciendo porque el ángel en mi oído derecho me seguía hablando cada vez más alto, más entusiasmado y más positivo.

El vuelo de vuelta fue horrible, porque el demonio del oído izquierdo había vuelto y empezó una lucha entre el oído izquierdo y el derecho. El ángel decía justo lo contrario de lo que afirmaba el demonio en mi oído izquierdo.

Por fortuna, pocas millas antes de aterrizar en el Aeropuerto Fiumicino de Roma, mi oído derecho ya se había liberado de las voces, de forma que había terminado esta doble vociferación. Ahora me encuentro relajado en mi clínica, trabajando con mis pacientes, intentando dar lo mejor de mí para su salud y procurando no prestar atención a la voz de mi oído izquierdo que va repitiendo las opiniones poco fundamentadas de la medicina convencional: ”esto realmente no funciona, estás engañando a tus pacientes; los escépticos y algunos científicos afirman que en tus remedios no hay nada, pretendes curarlos con agua pura …”.

Ya veremos. Si la voz no para en unos cuantos días, me veré obligado a tomar una dosis de Anacardium. Por el momento, de vez en cuando voy cerrando los ojos, para hacer una inspiración profunda e intentar acordarme de mi viaje a la India y de las maravillosas palabras que escuché en mi oído derecho, que permitió la entrada a una voz angelical…

En estos tiempos, muchas olas ruidosas de opiniones emocionales están arrasando e inundando nuestros oídos.

A todos vosotros os digo… el oído derecho lleva las noticias “derechas” correctas…

Un enorme abrazo a la familia homeopática

Renzo Galassi