¿Cómo se debe hacer el ayuno intermitente de forma saludable?

El ayuno intermitente es algo que se está poniendo de moda en los últimos años. Hay quien usa el ayuno intermitente para perder peso y otras personas que lo hacen de manera intuitiva. 

En cualquier caso, siempre es bueno saber cuáles son las maneras recomendadas de hacer el ayuno intermitente, saber qué tipos hay y qué recomiendan los expertos en nutrición para hacerlo de forma segura y saludable. Eso es lo que vamos a ver en este artículo.

¿Qué es el ayuno intermitente y para quién se recomienda?

Dentro del mundo del bienestar, de la naturopatía y de todas estas cuestiones, aparece el ayuno intermitente como una manera de conseguir ese bienestar. Lo definimos de manera muy sencilla, se trata de abstenerse de consumir alimentos en determinados periodos del día.

Muchos expertos en naturopatía recomiendan esta práctica a personas que padezcan artritis, Alzheimer, asma, esclerosis múltiple o que hayan sufrido un accidente cardiovascular.

Cosas a tener en cuenta antes de hacer ayuno intermitente para adelgazar

Muchas personas creen que esta “técnica” les puede servir para adelgazar. Y están en lo cierto, pero sí es recomendable tener en cuenta algunos aspectos antes de lanzarse, de manera que se puedan conseguir los resultados deseados.

Es bueno eliminar de la dieta el consumo de pan, azúcar y otras adicciones que se puedan tener. Este será un buen primer paso para conseguir resultados.

También debemos saber qué alimentos necesita el cuerpo, cuáles no son beneficiosos para la salud o cuáles suben la glucosa, entre otras cuestiones similares.

Un buen control de la tiroides también debería ser necesario, ya que podría ser esta la causa de la dificultad para adelgazar. Además, también sería necesario un control de la flora intestinal para quien le dificulte bajar de peso.

Por todo ello, lo que más recomendamos, en principio, va a ser siempre el asesoramiento por parte de un nutricionista. Este profesional te dará claves necesarias para que este procedimiento que vas a iniciar obtenga los resultados esperados en un buen tiempo.

Esto lo decimos porque, si el ayuno intermitente no se hace bien, puede propiciar un “efecto rebote” que haga aumentar el peso en lugar de bajarlo.

¿Cómo hacer el ayuno intermitente?

Existen varios tipos de ayuno intermitente. Entre los más populares se encuentran los siguientes. 

Ayuno de 12 horas

Debes escoger un periodo de 12 horas al día donde no puedas consumir nada. Este es uno de los planes que más se recomiendan a personas que están iniciando un plan de este tipo. 

Dentro de las 12 horas, se puede escoger parte de la noche. Mientras se está durmiendo, el cuerpo humano continúa quemando calorías, por lo que es un buen momento, como otro cualquiera, para hacer el ayuno.

El ejemplo clásico es terminar la cena a las 7 de la tarde y no comer nada hasta las 7 de la mañana del día siguiente. La ventaja es que es algo muy sencillo de hacer en cuanto el cuerpo (y la mente) se acostumbra a ese horario.

Ayunar dos días a la semana

Este método consiste en comer todo de forma normal durante 5 días de la semana, dejando dos para reducir las calorías durante esos dos días. Durante esos dos días, se recomienda que el número de calorías consumidas esté entre 500 y 600.

También se recomienda no hacer los dos días de ayuno seguidos, sino que sea en días alternativos.

El ejemplo que podemos poner es hacer un ayuno un martes y el otro, hacerlo el viernes. 

Ayuno semanal de 24 horas

Otra de las modalidades de ayuno intermitente puede ser hacer un ayuno a la semana de 24 horas. Puedes escoger hacer el ayuno después del desayuno de un día y hasta el día siguiente.

Lo importante aquí es pasar esas 24 horas en ayuno, no la hora en sí cuando lo inicies.

Durante esas 24 horas se debe beber la suficiente agua para evitar la deshidratación. También se puede tomar té o café sin azúcar, pero siempre en pequeñas cantidades.

Ten en cuenta que, hasta que el cuerpo se habitúa, este tipo de ayuno puede generar una sensación de fatiga, irritabilidad o incluso dolor de cabeza. Para adaptarse, te puede llevar un mes aproximadamente, es lo normal.

Ayuno alterno

En este caso, se trata de no hacer las comidas cada dos días. Esos días, puedes limitar el consumo a 500 calorías o incluso no tomar ningún alimento sólido. Los días donde no se hace ayuno, se puede comer lo que se quiera. No obstante, siempre es recomendable hacerlo de forma saludable.

Este tipo de ayuno es de los más difíciles de mantener a lo largo del tiempo y no se recomienda para gente que empieza a hacer este tipo de ayunos.

Ayuno de 20 horas

Es conocido también bajo el sobrenombre de “el ayuno del guerrero”. Se trata de no comer (o hacerlo en pequeña cantidad) durante esas 20 horas y usar el tiempo restante para una gran comida.

Durante esas 4 horas se recomienda un consumo equilibrado de vegetales, proteínas, grasas o incluso carbohidratos. 

Este tipo de ayuno debe hacerse con cuidado, ya que existe riesgo de no consumir suficiente fibra u otros nutrientes.

Ventajas y desventajas

Hay muchas cosas que te pueden ayudar para pasar esas horas si decides hacer estos ayunos. Pero como todo, cada cosa tiene su parte buena y la no tan buena. En este caso, entre las ventajas de hacer ayunos intermitentes podemos destacar la mejora de la autofagia, la limpieza del organismo, la disminución de la presión arterial y aumenta la pérdida de grasa.

No es algo que esté recomendado para todas las personas, ya que puede generar una ansiedad que puede ser peor en algunas personas.