La etapa más complicada para la suplementación es la infancia y lactancia, así como el embarazo, ya que son periodos de cambios y desarrollo en los cuales debemos ser muy precavidos. En el caso de los bebes o niños, están en continuo crecimiento y la actividad fisiológica de sus órganos aún no está a pleno rendimiento, de manera que habrá que tomar ciertas precauciones con las dosis y los productos que damos. Tanto el contenido como la cantidad que les administramos serán importantes para no producir efectos indeseados.

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Cuando la situación es el embarazo o la lactancia, y la madre es la que se tiene que suplementar tendremos que tener en cuenta que muchas sustancias pasan al feto por la placenta o, al lactante por la leche. De esta manera, aún se convierte en un trabajo más difícil, ya que son las primeras fases de crecimiento y son muy vulnerables. Sobre todo en estas, tendremos que influenciar lo menos posible a nuestro bebé, reduciendo al mínimo agentes externos que le puedan perjudicar.

Teniendo en cuenta esto, hay todo un mundo de terapias y suplementación natural inocua que, siguiendo unas pautas podremos utilizar cuando sea necesario.

Ácido fólico, vitamina B12, yodo y otros requerimientos en el embarazo

La recomendación básica en la concepción es el tratamiento con suplementos vitamínicos a base de ácido fólico durante los tres meses previos y el primer trimestre del embarazo como mínimo. Esta recomendación se basa en el riesgo aumentado de malformaciones congénitas graves en el feto cuando el aporte dietético no es el suficiente. No nos tenemos que olvidar de otros nutrientes imprescindibles como la vitamina b12 y yodo. La deficiencia de vitamina b12 en el embarazo supone también un incremento de las malformaciones congénitas y mayor riesgo de enfermedades metabólicas, como diabetes mellitus tipo II. Por otra parte, la falta de yodo contribuye a un menor desarrollo neurológico, a un bajo peso en el nacimiento, a una mayor incidencia de abortos y muertes prematuras, y una larga lista. Para esto hay suplementos vitamínicos que cubren estas necesidades, pero sin pasar los límites recomendables, ya que también podría haber repercusiones. Nuestra elección dependerá de nuestros hábitos alimentarios, pero tened en cuenta que en el embarazo aumentan los requerimientos básicos y que a veces es difícil llegar a nuestro objetivo solo con la dieta. Hay multitud de opciones, como prenatal, de Sura Vitasan.

Además de estos requerimientos nutricionales también habrá toda una serie de necesidades secundarias que se puede cubrir con la línea feminaissance, de Pranarôm. Como seria potenciar la elasticidad del perineo, con la ayuda de su aceite.

Suplementación natural en embarazo e infancia

Son etapas en cambio constante, en las que el cuerpo está vulnerable a cualquier infección y suelen haber muchas patologías de este tipo, como resfriados, bronquitis, gripes... Para evitar estas o disminuir lo máximo posible su aparición, una alimentación saludable es básica. Y como ayuda en todo proceso, tendremos suplementación y productos usados vía tópica que nos ayudarán a superarlos.

Para los más pequeños recomendamos la línea pranabebe, de Pranarôm. Sus productos se pueden usar desde los tres meses de edad. Y para niños, hay muchas posibilidades, como la línea animal parade, de Nature’s Plus.

En farmacia Coliseum le asesoraremos si necesita ayuda para decidir entre todos nuestros productos. ¡No dude en consultarnos!

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